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A diario, vemos más anuncios y productos de carácter inclusivo, como son cosméticos y prendas de vestir, pero lo mas común es que esta característica se oriente a tallas, colores y razas dejando aún un vacío muy importante en la diversidad de cuerpos y vidas.

Pinkwashing: El término fue originalmente acuñado por la Breast Cancer Action para identificar a las empresas que aseguraban apoyar a las mujeres con cáncer de mama, mientras que en realidad pretendían obtener mayores beneficios y mejorar su imagen de marca al incorporar a su publicidad una causa benéfica.

El coronavirus ha hecho cambiar nuestras costumbres, hábitos, formas de pensar, de relacionarnos e incluso de alimentarnos. Y sin darnos cuenta estamos ya acostumbrados a vivir de esta nueva forma, es incluso difícil pensar en cómo era cuando no todos llevábamos tapabocas por la calle.

¿Es para una paciente de cáncer de mama, el coronavirus, una nueva normalidad de su enfermedad o se ha convertido en un retomar con nuevos plazos el tratamiento?

Estamos comprometidas con tu comodidad y felicidad

Por esa razón, creamos este servicio exclusivo para ti "Prueba-te la experiencia Myrina" con el que puedes pedir hasta tres prendas Myrina en nuestra web, recibirlas en tu casa, probártelas, decidir si quieres una o todas y pagar después. 

¿Sabias que los colores que utilizas para vestirte o maquillarte, al combinarse con tus tonos naturales de piel, ojos y pelo, dan armonía a tu imagen y resaltan tu belleza?

Completa este test de 2 minutos, con el que descubrirás la paleta de colores que mejor te va. 

 

Desde Myrina hemos tenido una revelación y queremos compartirla. Hemos descubierto que el origen de los superheroes (casi siempre hombres y alguna mujer) y sus capacidades sobre humanas que les hacen invencibles, se remonta a las mujeres.

Para comprobarlo, hemos decidido emplear algunos de los superpoderes más comunes:

 

Durante todo el proceso de creación de la marca, de indagar, investigar y hacer encuentros con varias mujeres nos dimos cuenta que más allá de una costumbre de usar sujetadores, estos en realidad son para muchas de nosotras necesarios, bien sea para evitar rozaduras o aligerar el peso de nuestros senos que recae sobre la espalda, entre otras funciones.

Poco se habla sobre el embarazo y el cáncer de mama, parece como si se quisiera evitar mencionar los dos términos o como si las dos situaciones vitales no fueran compatibles. Pero esto es solo una construcción social que muchos investigadores están luchando por desmitificar.